Ser inBIsible

Reflexiones sobre los procesos de resignificación y la discirminación dentro de la Comunidad.

Burped on 2024-05-26

Hace unas semanas fue el Día del Patrimonio en Chile. Y pues, yo estando en Chile, fui a algunas rutas guiadas. Persiguiendo mi gran amor por la arquitectura patrimonial y la historia resignificada y revisitada en la época actual, fue una experiencia bastante interesante.

No quiero rantear de que el Día del Patrimonio son dos días, o que la experiencia de usuario del sitio web gubernamental, probablemente construido rápido en React, deja mucho mucho que desear. O que las categorizaciones de eventos eran bastante pobres, o que sus descripciones eran paupérrimas. No quiero hablar de nada de eso.

Fui a un recorrido patrimonial que ofrecía Museo Di, llamado Que viva la noche, que viva el amor, una mirada patrimonial a la historia de la Comunidad LGBTIANB+. Una actividad que duró unas dos horas, con guías bastante conocedores de lo que estaban mencionando. Y me saltaron algunas reflexiones, que quisiera compartir aquí.

Visitamos unos 4 sitios importantes, históricamente hablando, de la Comunidad en Santiago (y, por extensión cosmopolitana, de Chile). Los sitios tenían un hilo conductor, que ahora no recuerdo. Y toda la dialéctica presente en ese recorrido era gay-focused: hablamos de escritores gays, radiodifusores gays, productores gays, y un poco, sólo un poco, de personas lesbianas. Esto me emputa un poco, la verdad.

Y me emputa porque la Comunidad es bastante bi-reacia, aún hoy. A mediados del 2024, todavía escucho gente decir "una mujer bi está confundida, es una lesbiana encubierta". O "todos somos un poco bisexuales". O "no existe la bisexualidad, es una fase". Es una de las razones por las que decidí dejar de salir del closet, tras escuchar a Edo Caroe comentar la experiencia de su hermano. Love is love, right?

La bisexualidad es difícil de entender

Es fácil caer en la caricatura de la victimización minorista. En algunos casos es así, por diseño personal: cuando una persona dice "tú no eres inserte condición de minoría, sólo estás confundido/a/e", es un acto fóbico. Y esto puede ser por ignorancia o por pleno odio (en mayor o menor medida, un acto x-fóbico es un acto violento y de odio). Pero cuando una persona dice "no creo en la inserte condición de minoría, nunca he conocido a une/a/o" o algo similar, es posible que no sea fobia, sino pura ignorancia o desdén. Al final del día, si algo no afecta a boca, qué importancia tiene en el precio del pan? Por eso es, para mí, importante moderar y modular los discursos reaccionarios ante las fobias, porque si no distinguimos a quienes debiéramos educar de a quienes debiéramos reformar, qué sentido tiene cualquier lucha?

Dicho todo esto, me parece que las preponderancias de la lucha visibilizadora y resignificante en la Comunidad son desproporcionadamente gay-lead y lesbian-lead. Es decir, vamos primero por defender la homosexualidad, y luego entramos en el resto. Y tiene sentido, porque son los primeros grupos que fueron violentados y los primeros (entiendo, en mi ignorancia) en salir de las sombras. Y claro, si son la punta de lanza, por qué iríamos a la primera línea?

Aquí está el por qué: toda dinámica de poder verticaloide en un grupo sociocultural tiende, de manera casi materialística, a concentrar el poder para sí mismo. Es por ello, en parte, que Movilh y Rolando jiménez fueron el estandarte de la Comunidad por tanto tiempo, porque conformaban con las diversas normas que la sociedad establecía en aquellos tiempos. Y como se encontraron en la pinacle del poder, lo concentraron y lo usaron a su favor. Apoyando y apañando a otras personas en el camino, es cierto, pero sin el real bien común en vista. Una característica común de los movimientos reformadores y no revolucionarios en términos culturales.

Entonces, resumiendo: estoy enamorao (aunque creo que Ricardo Montaner no tiene cabida aquí). Y, como comunidad contracultural, nos hacemos un flaco favor al no exigir nuestro derecho de representación y resignificación, en favor de luchas "más antiguas" o "más importantes ahorita". Porque el después, donde somos nosotros importantes, no llega nunca, incluso después de muertos. Y es importante que, si ostentamos poder, incluyamos y diversifiquemos de mutuo propio y maneras consensuadas y lo más proactivas posibles: es muy probable que caigamos en la misma dinámica.

El mundo olvida que la bisexualidad es algo real

Por otro lado, la labor educativa dentro de la Comunidad es, a mi parecer, bastante electiva. Cómo es posible que queramos hacer actividad política y sociopolítica, si no nos formamos entre nosotros primero? Cómo es posible que nos enfoquemos más en los Disturbios de Stonewall que en la Marcha de los Colipatos? O que nos traiga más emociones RuPaul que Pedro Lemebel?

Yo soy el primer insensato que se ha dedicado nada a estudiar la historia de su Comunidad. No creo ser capaz de nombrar a 3 íconos no-heterosexuales en la historia de Chile. Pero soy capaz de dar 3 razones por las cuales Diego Portales fue nefasto para la república.

Entonces, si quiero y queremos ser una Comunidad organizada, tenemos que tomar páginas del libro de acción política anarquista, y organizarnos y educarnos. Sólo de esa forma podremos educar y organizar a otras otredades. La lucha siempre tiene que ser desde el conocimiento, y la desobediencia civil, culta e informada.

Hazte cargo

Y todo este pensar y escribir me recordó una frase que escuché de una persona con la que trabajaba, que alguna vez le retrucó a otra persona de la Comunidad:

Es que tú vives desde el luto, y no desde la celebración.

Y hoy, aquí, estoy plantado para plantear el ENORME privilegio que toma espetar algo así:

Como buen guerrero de la justicia social, me tomo la atribución de pedirle al mundo que revise sus privilegios. Porque es importante, a más no poder, que nos plantemos en el mundo desde los lugares que habitamos, y que sepamos dónde habita el resto. Y, también, es importante a más no poder que respetemos al resto, sus procesos, su intimidad, y creo que ese es el lugar más incómodo y difícil para ponernos. Porque cómo chucha podemos respetar si no miramos más allá de nuestra córnea?

Resumiendo, me sentí in-bi-sible esa tarde. Y lo voy a volver a sentir. Y me emputa. Y tomo mi parte de la responsabilidad para que otras personas no lo sientan, tanto conmigo presente como sin mi.